Celaya, Guanajuato.- Trabajador de servicios municipales contestó agresivo a vecina del andador Brasil porque le increpó sobre la forma de podar los árboles, “Todos estamos podando y todos estamos diciendo pendejadas” le contestó molesto, antes la Sra. Ríos le pidió la orden de poda, a lo cual el trabajador, mencionó que no lo molestara porque estaba desayunando.
La señora Ríos el martes por la mañana se percató de la poda indiscriminada que realizaban trabajadores de Servicios Municipales sobre el andador Brasil, al preguntarle al trabajador del área quien dijo llamarse Gerardo, preciso “ Si quieren más información vayan a servicios municipales” después insistió no le importaba la petición, y no lo molestaran porque estaba almorzando.
Acto seguido se suscitó un intercambio de agresiones por parte del trabajador a la vecina, y a quien escribe estas líneas, el trabajador Gerardo se dispuso a contestar su teléfono, argumentando se le había ofendido, por preguntarle de una manera no amable sobre la poda de árboles.
La Sra. Ríos, explicó que hace meses se comunicó al área de Servicios Municipales para denunciar que los trabajadores podan los árboles indiscriminadamente, por lo que desde la Dirección se comprometieron a que habría un acuerdo entre la colonia Latino y la colonia La Misión, para que antes de podar se llamara a los representantes de colonia, cuestión que no ha ocurrido.
Ocurre que el andador Brasil que se encuentra entre los límites de la colonia Latino y la Misión desde hace años se permitió que se abrieran frentes para estacionar sus autos, derribando árboles que son especies protegidas; por ejemplo unos mezquites que se encontraban frente al número 100, los permisos fueron autorizados de manera extraña. En el número 100 vive la Sra. Carmelita, a quien le molestan que caigan las hojas de los árboles y poder eso manda llamar a Servicios Municipales para que poden el mezquite, el árbol poco a poco se ha estado muriendo.
La vecina de la Misión la Sra. Ríos, precisa que aún hay mezquites que “están matando y no son poda” , le externo al trabajador que habían árboles que se han secado “ yo puedo comprobar que los árboles que sembré, ustedes los secaron y está el escrito, y anteriormente vinieron sus supervisores y les llamaron la atención…” .
No se pudo llevar una conversación con el trabajador porque al mismo que tiempo que hablaba la Sra. Ríos, el trabajador Gerardo contestaba: “ me vale , vaya y dígale a quien quiera no me importa”, gritando a mitad de la calle del andador Brasil.
De este suceso fueron testigos sus compañeros quienes no dijeron nada al ver la actitud prepotente del trabador de Servicios Municipales, quien se dijo ser jefe de su compañeros.