
Por: Ximena Ojeda. Fotos: Diego Deca.
Celaya, Guanajuato .- Oriundo de la ciudad de Celaya Alberto Danyuro desde temprano en su vida decidió que se quería dedicar a la actuación. «Yo quería pertenecer al grupo de los arlequines». Cuando entró a la preparatoria Oficial de Celaya formó parte durante tres años de Teatro Estudio Arlequín. Posteriormente se formó en la Facultad de Filosofía y Letras en la UNAM, en el colegio de Literatura Dramática y Teatro.
Fue parte del colectivo que fundó la Tinacoteca Clown en blanco y negro, como una serie de cuadros de payaso donde se emulaba el cine mudo y el estilo payasesco de Chaplin, pero en el teatro. Fue alumno de Otto Minera en dirección escénica y tuvo la oportunidad de actuar con Marina de Tavira, Karina Giddi y con Rafael Sánchez Navarro, entre algunas otras personalidades.
Alberto Danyuro regresa a la ciudad que lo vio crecer para ofrecer al público celayense un taller de teatro Clown. El clown es un estilo de actuación que se vincula históricamente con el circo, la ópera y el teatro.
¿Qué es y de dónde surge el teatro clown?
Alberto Danyuro, comentó acerca de los antecedentes del teatro clown y su evolución a través de la historia en varios ámbitos desde sus orígenes hasta nuestros días.
“El teatro clown contiene antecedentes históricos en el circo romano como una persona con peculiaridades físicas objeto de burla que entretenía al público. […] Por otro lado tenemos el payaso que está vinculado a la comedia del arte; digamos que comparten las raíces hasta que en la transición de la edad media al renacimiento existió algo en Europa llamado la comedia del arte, que fue una influencia muy fuerte en los espectáculos teatrales de la época. […] luego vino la ópera y rescató romantizando todos estos asuntos medievales y renacentistas”.
La ópera fue como uno de los epítomes en la experiencia escénica, posteriormente en Estados Unidos, surgió el circo de tres pistas que como su nombre lo dice, que contó con tres actos simultáneos en tres pistas circulares simultánea, así lo específica el actor.
“Lo que hicieron los actores estadounidenses era agrandar, agigantar sus gestos. entonces fue necesario esta indumentaria que ya nos es más familiar de los zapatos gigantescos, las manotas, las pelucas coloridas, maquillajes muy muy exagerados para ser visible justamente al personaje y sus expresiones desde la distancia. Esa influencia obviamente por ser Estados Unidos nos llegó acá a México y de ahí se copió el estilo del “payachito de fiesta”. Pero cuál es la diferencia entre ese payasito de fiesta que muchas veces podemos ubicar como un poco vulgar, incómodo o vergonzoso a este otro payaso que realmente es una estilización y una tradición que viene desde hace veintitantos siglos […] pues justo el rescate de esa tradición europea de comedia y comedia física que es el clown”.
Alberto Danyuro, tiene gran pasión por su profesión y a lo largo de la conversación, mostró su emoción por explicar al público una de las más bellas profesiones del trabajo escénico.
“Entonces ¿que chixgxdos es el clown? como tal es un actor que se convierte en un personaje, es una faceta de él mismo y es un experto en la comedia. El clown es un experto en la comedia que tiene y entiende sutilmente el mecanismo del humor, pero no significa que esté únicamente restringido a situaciones cómicas, sino que de diferentes tipos de situaciones él puede rescatar una parte risible. El clown es un actor… personaje que experimenta el fracaso, pero no se instala en el fracaso, sino sería un personaje trágico. No, el clown le da la vuelta a la situación y eso es lo que lo vuelve cómico”.
Un punto de convergencia “La Tinacoteca”
La creación de nuevos espacios culturales como lo es “La Tinacoteca” abre a posibilidad de la recreación de nuevas formas de expresión, donde el arte puede experimentar nuevas formas creativas.
“En la Tinacoteca creímos que era un lenguaje que en ese momento nos ayudaba a expresar lo que queríamos no tanto porque viéramos allí el fracaso no sino porque era una manera interesante de hacerlo con una capacidad expresiva que no iba a tener límites en el estilo. Nos iba a permitir una libertad expresiva mucho mayor que a lo mejor la restricción que nos podría poner un realismo, y todo esto por supuesto ante la carencia, porque para lograr un realismo muy cinematográfico se requiere dinero, en cambio, el clown con sus posibilidades de comedia y de comedia física nos libera y nos permite hacer muchísimas cosas con nuestro propio cuerpo, con los poquitos recursos que tengamos a la mano. Yo puedo jugar a que mi chancla es un teléfono, un plátano, el volante de mi nave espacial, lo que sea […]”.
¿Por qué regresar a Celaya?
Hay una creencia arraigada sobre la falta de talento en la localidad, Alberto Danyuro, nos demuestra que en nuestra ciudad hay grandes creadoras y creadores artísticos, que regresan al suelo cajetero por el gran amor a sus raíces y para compartir su experiencia profesional en este caso en el área del teatro clown, que tiene un carácter multidisciplinario vinculado a la consciencia social, así lo refirió Alberto.
“Cuando estuvimos en nuestra búsqueda más exhaustiva en nuestra compañía de clown llegamos a ir a talleres que daban en los encuentros internacionales de clown en la Ciudad de México y había un grupo […] que nos decía que habían ido a lugares de conflicto en África, países que estaban en conflicto bélico. Niños que no tenían que comer porque la guerra estaba allí, niños huérfanos niños, desposeídos, marginados, y que a veces uno pensaba “qué tendría que ir a ser un payaso ahí” a lo mejor hasta podría parecer duro, inapropiado… pero no, […] al contrario, el payaso se vuelve como un tesoro, como una válvula de escape invaluable, como un recordatorio de que, pese a cualquier cosa, siempre está ahí en contacto humano. El payaso es un ser generoso, se sube al escenario para darse a sí mismo y hacer reír al otro”.
No vamos a tapar el sol con un dedo: La violenta Celaya
Lamentablemente la situación de la ciudad de Celaya, es la extrema violencia que vivimos quienes habitamos en el estado de Guanajuato, fenómeno que es motivo de reflexión en el actor.
“Yo lo hago evidentemente por el cariño que le tengo a Celaya y porque esto es lo que sé, es mi vocación, entonces eso ofrezco y al mismo tiempo pues no vamos a tapar el sol con un dedo. Los celayenses y quienes estamos involucrados con Celaya sabemos cuál es y cuál ha sido la triste realidad de Celaya durante más de diez años y es la guerra, la guerra del narco y todas sus tangentes. Nos ha tocado ver la muerte muy de cerca y muy feo… merecemos reír, empecemos reír, empecemos recordar eso, que puede existir aún en esta porquería el contacto, la sonrisa. […] Y no porque queramos negar la realidad, sino porque estamos muy conscientes de la realidad, pero decidimos sonreír porque si no, tendríamos que volvernos locos. Las risas nos liberaron, nos va a liberar de eso y nos va a dar la oportunidad de mirar las cosas porque después de reír te da un suspiro y ese suspiro te permite continuar un poco más hacia donde sea que vaya tu camino”.
En el camino de un sueño
Alberto Danyuro, es un artista que como muchos oriundos en esta ciudad desean cumplir el sueño de ver una sociedad celayense diferente, ello con un gran aliado: el teatro.
“Yo les decía a mis amigos que yo tenía el sueño de transformar a Celaya en el Broadway mexicano; hacía la broma con mis familiares y mis amigos porque yo sabía que, a lo mejor por mis recursos, por mi nacimiento, por las oportunidades que tenía yo no iba a llegar, no voy a llegar a Hollywood […] pero entonces si la montaña no va a ti pues tú vas a la montaña. Entonces yo pensaba hay que hacerlo aquí, ¡hay que hacerlo aquí! […] Es ese, es el sueño, permanece ahí en Celaya, porque soy de Celaya, no me voy a ir a otro lugar. Podemos ofrecerle a la gente esa posibilidad con nuestro taller, sobre todo en este momento de la vida en el que todos tenemos el sueño, el deseo de brillar, aunque sea un momento pues entonces hay que hacerlo de la mejor manera posible […] ”
Mi invitación es abierta para el público en general. Todos podemos hacer teatro. Me siento muy seguro de eso, que todos podemos descubrir en nosotros mismos la posibilidad de hacer reír a alguien más […] yo voy a poner todo lo que esté en mí, todo mi conocimiento, todo mi amor, toda mi generosidad para que quien vaya aprenda lo más posible y se sienta muy seguro de pararse en el escenario y hacer reír a la gente y lograr transformarse en algo bueno”.
Alberto invita a un taller de teatro clown, se llevará a cabo el 19, 20, 26 y 27 de febrero de 10:00-13:00 horas. No se requiere experiencia previa. Más información con Producciones Arlequín, puedes buscarlos en su página de facebook: https://www.facebook.com/YoSoyArlequin