By Redacción
Guanajuato, Guanajuato.- La diputada local por morena Magdalena Rosales Cruz y el Diputado Raúl Humberto Márquez Albo proponen aumentar los castigos y sanciones a quienes agredan a personal de la salud en esta contingencia, por lo que se propone proyecto de decreto que reforma los artículos 150 a y 151 del Código Penal del Estado de Guanajuato.
Comentó que, a propósito de estos lamentables acontecimientos discriminatorios en el estado, es que recalca la importancia y urgencia de legislar en la materia; por ello, el pasado 6 de noviembre de 2019, el Grupo Parlamentario de MORENA presentó una iniciativa con proyecto de decreto por el que se reforma y adiciona el título segundo del Código Penal del estado de Guanajuato, para adicionar el delito de DISCRIMINACIÓN, con el propósito de no dejar impunes las conductas de las personas tendientes a menoscabar la dignidad e integridad de otras por un amplio catálogo de razones, entre ellas, el trabajo o la profesión.
En este mismo sentido, la OMS (Organización Mundial de la Salud), recomienda encarecidamente a México tomar medidas de cero tolerancias a cualquier forma de violencia contra los trabajadores de la salud como agresiones verbales, acoso, violencia sexual y física, en cualquier momento y sobre todo durante la contingencia sanitaria.
Rosales Cruz expresó que “La discriminación ha escalado de nivel, y el personal de salud ha sido blanco de agresiones y actos violentos, poniendo en riesgo su salud, integridad y su vida misma, bienes jurídicos que son el objeto de protección de esta iniciativa; no obstante, debe señalarse que la salud pública también pretende salvaguardarse con la misma, en virtud de que las agresiones al personal de la salud pueden desencadenar en un perjuicio general en la eficacia de la prestación del servicio de salud a la población”.
Precisó que en condiciones normales, el sector salud es víctima del 25% del total de los actos catalogados como violencia en el trabajo, siendo las enfermeras y enfermeros quienes más sufren violencia verbal e incluso física por parte de los pacientes y sus familiares.
En estas circunstancias, con el agravante de la pandemia actual, la violencia no solo se da en sus espacios laborales y por parte de las personas que tienen contacto directo con ellos, sino que en el espacio público se han reproducido estos actos además de discriminación.
El personal de salud (médico, de enfermería, de limpieza, manejo de alimentos, almacenamiento, traslados, rayos X, laboratorio, entre otro personal paramédico) además de estar realizando sus labores en condiciones difíciles, por el riesgo de infección, las largas jornadas, el estrés y desesperanza, en varios estados del país han sido maltratados físicamente, se les ha lanzado cloro, se les ha prohibido el acceso a centros comerciales, al transporte público, entre otras agresiones.
Desde el 19 de marzo y hasta el 16 de abril pasados, el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred), recibió quejas desde 26 estados del país por insultos, burlas, amenazas, maltratos, hostigamiento vecinal a trabajadoras y trabajadores de centros de salud, médicos, enfermeros y estudiantes de medicina. Desde Guanajuato se han recibido un total de 5 quejas, por lo que no es un problema lejano a nosotros.
Como también se han realizado diversos llamados al cese de agresiones contra el personal de salud, éstas continúan, por lo esta iniciativa busca sancionar con mayor severidad las agresiones y comportamientos violentos perpetrados contra servidores públicos del área de la salud, a fin de proteger a quienes están protegiendo nuestra salud; la violencia contra quienes protegen la vida de las personas es un acto totalmente incomprensible, aberrante y contradictorio que no debe ser tolerado y por ello consideran razonable y pertinente la presentación de esta iniciativa, que pretende aumentar la punibilidad del delito de lesiones cuando la víctima sea personal de la salud.
