Celaya, Guanajuato.- Mediante un comunicado, Derivado de las declaraciones que hizo el día de ayer 7 de octubre la ciudadana servidora pública Elvira Paniagua Rodríguez en torno a la solicitud de revocación de mandato que estamos organizando donde afirma que “es aprovechar el momento”, y que “lo más fácil es estar criticando y señalando y sacrificar alguien”, aclaramos lo siguiente:
Desde el 7 de septiembre en el primer aniversario de Alianza Ciudadana Celayense, se externó que se pediría la Revocación de Mandato, si la situación de violencia, delincuencia y omisión de responsabilidades continuaba*.
De igual manera resaltamos que el 15 de septiembre Masive Caller publicó una encuesta realizada en los 100 municipios más importantes del país donde resalta que el gobierno encabezado por Elvira Paniagua, ocupa el lugar 98 en mayor percepción de inseguridad, con menor aprobación, y con menor índice de confianza. En unas semanas cayó 10 lugares, es decir, empeoró.
Pedir la Revocación del Mandato, desde el punto de vista del Derecho Electoral, es un acto cívico, y se interpreta como el “Procedimiento legal mediante el cual los legisladores o representantes elegidos pueden ser destituidos por sus electores”. Es la afirmación de un derecho ciudadano a tener un gobierno que represente sus ideales de comunidad y ciudad. Hoy la inseguridad, la desconfianza y la desaprobación al gobierno de la ciudadana Elvira Paniagua crece día con día, ella ha dejado de representar los intereses de los celayenses.
Solicitar al Honorable Congreso del Estado, que nos permita buscar un gobierno y una administración municipal confiable, capaz, eficiente, responsable y sensible al dolor que embarga a decenas de familias que han perdido a sus familiares, que han perdido su patrimonio, que han sido lesionadas física y psicológicamente, es un acto de justicia.
Y esa situación ha empeorado. La ciudad está indefensa, los ciudadanos todos los días son afectados en su patrimonio, e integridad física. El obituario del dolor cada día es mayor, las paredes de la presidencia municipal permanecen tapizadas de reclamos e indignación. La administración es permisiva de actos delincuenciales a la luz pública.
Después de la tragedia del 5 de agosto, la gente comienza a romper el cerco del miedo, ya son miles las que se acercaron a firmar la petición de Revocación de Mandato. Para la servidora pública Elvira Paniagua Rodríguez la confianza que le entregaron los celayenses se ha terminado. Si se queda, todos lo lamentaremos.
